Aquí algunas fotos de la fabricación del vidrio de Moser, en Karlovy Vary, República Checa. A ver qué le parecen público conocedor.
Mostrando las entradas con la etiqueta viajando y chambeando. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta viajando y chambeando. Mostrar todas las entradas
domingo, septiembre 12, 2010
martes, abril 07, 2009
24 horas en Berlín
Aquí la segunda parte del viaje alemán. "Un chilango suelto en Berlín":

6:00 am. La estación de Berlín

6:05 am. El tren en el que viajé desde Frankfurt, se llama ICE, y no, no lo maneja Vanilla.

6:30 Mi chingona habitación del Ellington Hotel. Porque la chairez no está peleada con el estilo

8:00 Hablando de chairez, luego luego le cai a Alemania oriental, donde sendas estatuas de Papá Marx y Tío Engels me recibieron. Aquí el niño le pidió a Marx una bicicleta china y mejores condiciones de trabajo para sus maestros del Kinder Garten.

9:00 Dejando el asqueroso mundo capitalista.

9:05 De este lado un soldado gringo...

9:06 ...del otro uno de la Unión Soviética.

9:10 ¡Bienvenidos a la República Democrática Alemana!

10:00 Aquí un pedazo del infame muro que dividía a Berlín

10:30 Por ahí pasaba el muro, aquí miles de balones se perdieron en cascaritas callejeras, por eso el monumento del fondo.

11:00 La foto que ningún turista se puede perder.

11:30 Vea usted cómo el muro dividía gachamente hasta las entradas de las casas.

12:00 Pero ahora todo es felicidad, y el muro se vende en pedacitos en las tiendas de souvenirs.

12:30 La foto turística del recuerdo.

13:00 Y ahora vámonos de regreso a Berlín occidental, pero caminando, porque eso de pagar 120 pesos por 10 estaciones en metro no va con mis principios. ¿Dónde estás metro chilango con tus 2 pesitos por 273 estaciones? Arriba el río Spree y la catedral de Berlín.

14:00 Berlín, como todas las grandes ciudades, siempre está en construcción y Dixi hace el paro a la hora de hacer del baño.

15:00 ¡Una frase de Walter Benjamin! weee, hay que tomarle foto, ahí luego investigamos qué dice.

15:30 Polanco meets Berlin

16:00 ¡Ésta sí es una muestra de cultura alemana! ¡Vaya!

16:10 Sopa de letras afuera del museo de arte moderno, a ver si no les pone multa el IFE

17:30 La Gedächtniskirche, en la plaza Breitscheidplatz, así quedó tras los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.

18:00 Por atrás de la puerta de Brandemburgo, sacándole provecho al lente 70 - 300 que está acabando con mi espalda.

19:00 En el interior de la Iglesia Memorial Kaiser Wilhelm

20:00 Edificio de la empresa estatal de trenes, Deutsche Bahn en Potsdamer Platz

21:00 La foto que ningún fan de Win Wenders se puede perder, la victoria alada en medio de Reforma, que diga, del Tiergarten, chingón bosque en medio de Berlín. Yo como soy medio fan, medio salgo.

22:00 Chin, caminé en círculos y regresé a Alexander Platz...

23:00 Ya en el hotel, un jugo tamaño boing de triangulito cuesta unos 75 pesos, una cerveza de un litro 15 pesos. ¡Hay qué ahorrar!
<
¡Luego le seguimos!
miércoles, diciembre 10, 2008
Nacht über Berlin
Pues resulta que me enviaron a Frankfurt para hacer un reportaje sobre Lufthansa, que sale mañana jueves 11 en El Economista.
Y aprovechando el salto al charco, me tomé unos días para ir a...

¡Tarán! Berlín, una ciudad que se me había escapado en mis 3 viajes anteriores al decadente, pero atrayente continente, al que he viajado becado y sin un quinto, como todo chairo latinoamericano. Este viaje no fue la excepción, porque sólo me llevé 100 euros y me sobraron 10.

Arriba el teatro Maxim Gorki de noche, con barrida de carrito y biclas. Gorki es el escritor de la obra de teatro que adaptó Jean Renoir para su peli "Los bajos fondos" , que todo ser con capacidad de reproducción debe ver.

El museo egipcio, con su lema "All art has been contemporany".

Los interiores, con su chidísimo patrón en el suelo.

El Berliner Dom, desde la oscuridad del Lustgarten. Porque Berlín es oscura oscura, porque pos cómo se va a desperdiciar la lana en alumbrado público.

El Ramstein, que diga, el Reichstag, con su inscripción "DEM DEUTSCHEN VOLK", algo así como "cómprese un vocho". La bandera se agita bajo el viento a 5 grados bajo cero. Sólo a un insensato se le ocurriría estar tirado en el suelo (odio cargar el tripié) tomando fotos a media noche.

Me permito poner algunas fotos de las instalaciones de Lufthansa en Frankfurt. Arriba, los hangares. Busqué el hangar 18 de la rola de Megadeth, pero hombres de negro impidieron mi paso.

El centro de entrenamiento, que me recordó las ferias donde se podía subir al "Astroliner", ¿se acuerdan?

El 747, el avión más largo de la flota.




Más aviones, talacha a la alemana y el entrenador de vuelo, un videojuego muy costoso.

Eso es todo por hoy, pásele a la salida. En alguna otra entrega, bares punks, barrios chidos, muros ¡y mucho más!

Zum!
Y aprovechando el salto al charco, me tomé unos días para ir a...

¡Tarán! Berlín, una ciudad que se me había escapado en mis 3 viajes anteriores al decadente, pero atrayente continente, al que he viajado becado y sin un quinto, como todo chairo latinoamericano. Este viaje no fue la excepción, porque sólo me llevé 100 euros y me sobraron 10.

Arriba el teatro Maxim Gorki de noche, con barrida de carrito y biclas. Gorki es el escritor de la obra de teatro que adaptó Jean Renoir para su peli "Los bajos fondos" , que todo ser con capacidad de reproducción debe ver.

El museo egipcio, con su lema "All art has been contemporany".

Los interiores, con su chidísimo patrón en el suelo.

El Berliner Dom, desde la oscuridad del Lustgarten. Porque Berlín es oscura oscura, porque pos cómo se va a desperdiciar la lana en alumbrado público.

El Ramstein, que diga, el Reichstag, con su inscripción "DEM DEUTSCHEN VOLK", algo así como "cómprese un vocho". La bandera se agita bajo el viento a 5 grados bajo cero. Sólo a un insensato se le ocurriría estar tirado en el suelo (odio cargar el tripié) tomando fotos a media noche.

Me permito poner algunas fotos de las instalaciones de Lufthansa en Frankfurt. Arriba, los hangares. Busqué el hangar 18 de la rola de Megadeth, pero hombres de negro impidieron mi paso.

El centro de entrenamiento, que me recordó las ferias donde se podía subir al "Astroliner", ¿se acuerdan?

El 747, el avión más largo de la flota.




Más aviones, talacha a la alemana y el entrenador de vuelo, un videojuego muy costoso.

Eso es todo por hoy, pásele a la salida. En alguna otra entrega, bares punks, barrios chidos, muros ¡y mucho más!

Zum!
Suscribirse a:
Entradas (Atom)